Protestas en Colombia no cesan. El ministro de Defensa de Colombia, Carlos Holmes Trujillo, pidió este viernes perdón por el presunto “homicidio” del abogado Javier Ordóñez a manos de la policía, un suceso que ha desatado intensas protestas en los últimos días en Bogotá y algunas otras ciudades del país.
“La policía nacional pide perdón por cualquier violación a la ley o desconocimiento de los reglamentos en que haya incurrido cualquiera de los miembros de la institución”, dijo el funcionario.
Holmes Trujillo aseguró que, paralelo a la investigación penal en la Fiscalía, la Policía investiga a los dos uniformados involucrados en el hecho “por el presunto delito de abuso de autoridad y de homicidio”.
El doctor Javier Ordóñez, de 46 años, recibió repetidas descargas eléctricas de dos policías con una pistola paralizante. El incidente quedó grabado en un video, que se viralizó y causó indignación entre la población.
La defensa de Ordóñez alega que, además, los policías lo masacraron a golpes en la cabeza, hombros y otras partes del cuerpo.
El abogado Vadhit Gómez, quien representa a la familia Ordóñez, dijo a medios locales que “tiene un golpe ‘macabro’ en la parte frontal derecha”.
“Tengo las fotos de cómo quedó la víctima (…) a Javier se le masacró, se cometió un delito de homicidio agravado y un delito de tortura, por lo menos, un abuso de autoridad”, agregó a Blu Radio.
Protestas en Colombia no cesan; suspenden a policías
La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, afirmó que el abogado fue asesinado.
Según cifras otorgadas el viernes por la Alcaldía de Bogotá, los hechos dejan en total 10 muertos en las protestas en en este sitio. Más otras tres confirmadas por la Alcaldía de Soacha.
Este viernes se programaron más protestas, movilizaciones y cacerolazos, en Bogotá.
Cientos de manifestantes salieron el jueves a las calles de la capital colombiana en la segunda noche de protestas contra el abuso policial.
Decenas de manifestantes llegaron el jueves por la tarde a una estación policial de Villa Luz, donde los policías llevaron a Ordóñez antes de su muerte en una clínica. El miércoles había sido atacada y destruida parcialmente esa estación policial.
Además, hubo protestas en varias localidades de la capital colombiana, así como actos vandálicos en contra de estaciones de Policía.
Además de la cifra de fallecidos, las protestas han dejado más de 370 heridos, entre civiles y policías, unos 56 puestos de policía vandalizados y varios buses de servicio público incinerados.
De las víctimas, siete fallecieron en Bogotá y tres en Soacha.
Hubo además 77 ataques a vehículos de servicio público, 22 de los cuales fueron incendiados en medio de las 26 protestas que se extendieron a otras ciudades como Medellín y Cali, según precisaron las autoridades.
La Policía dijo que había capturado a 70 personas.
Muchos colombianos exigen reformas en los protocolos utilizados por la policía en sus procedimientos.